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NATIONAL COMMITTEE TO FREE THE CUBAN FIVE
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Official Statement of Bernardo Alvarez, Venezuelan Ambassador to the United States Oct. 6, 2009 Thirty-three years ago today, October 6, Luis Posada Carriles orchestrated an act of international terrorism that resulted in the cold-blooded murder of 73 innocent civilians aboard a passenger plane. While awaiting trial in Venezuela for first-degree murder as the mastermind of the terrorist plot, Posada Carriles escaped from prison. There is a warrant for his arrest in Venezuela, as well as pending criminal proceedings against him. After continuing his reign of terror in Central A me rica in the ensuing years, Posada Carriles eventually made his way illegally into the United States in March of 2005. On June 15, 2005, Venezuela requested that the United States detain and extradite him, pursuant to treaties and international conventions. The United States has thus far sidestepped our extradition request and instead charged him for minor immigration-related infractions. The terrorist remains free in the streets of Miami . On this sad anniversary, the Embassy of the Bolivarian Republic of Venezuela in Washington, D.C., wishes to remember the victims of Cubana de Aviación 455: Sabrina Paul, the little nine-year old Guyanese girl aboard the aircraft. Nancy Uranga, the twenty-two year old Cuban fencer, pregnant with a child who never had a chance at life. Raymond Persaud, the nineteen-year old medical student from Guyana on his way to medical school in Havana. Carlos Cremata Trujillo, the forty-one year old flight dispatcher and amateur dramatist. Gold medal nineteen-year old fencer from Havana, Enrique Figueredo del Valle. Let us remember them, and all the 73 persons aboard that ill-fated passenger airplane who were brutally murdered by Luis Posada Carriles on October 6, 1976. Each of them left family members behind: mothers, fathers, wives, husbands and children. Only nine of the 73 bodies were recovered at sea. The families have yet to bring their grief to closure. The Bolivarian Republic of Venezuela will remain committed to bringing Luis Posada Carriles to Justice in Caracas for 73 counts of first-degree murder. We will never forget one of the most terrible acts of modern terrorism committed in the hemisphere.
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Declaración Oficial del Embajador Bernardo Álvarez 6 de octubre de 2009 33 años atrás el día de hoy, 6 de octubre, Luis Posada Carriles orquestó un acto de terrorismo internacional que resultó en la muerte a sangre fría de 73 civiles inocentes, a bordo de un avión de pasajeros. Mientras esperaba por un juicio en Venezuela por el homicidio en primer grado, como autor intelectual del complot terrorista, Posada Carriles escapó de prisión. Hay una orden de arresto contra él en Venezuela, así como un procedimiento criminal pendiente. En este triste aniversario, la Embajada de la República Bolivariana de Venezuela en Washington, D.C., desea recordar a las víctimas del avión de Cubana de Aviación 455: Sabrina Paul, la pequeña niña guyanesa de 9 años a bordo del aeroplano; Nancy Uranga, la esgrimista de 22 años, embarazada de un niño que nunca tuvo la oportunidad de vivir; Raymond Persaud, el guyanés de 19 años, estudiante de me dicina que iba camino a la escuela de medicina en la Habana; Carlos Cremata Trujillo, un hombre de 41 años, empleado de la aerolínea y dramaturgo aficionado; el esgrimista de 19 años de edad, nacido en la Habana, ganador de la medalla de oro, Enrique Figueredo del Valle. Vamos a recordarlos, así como a las 73 personas a bordo del infortunado avión de pasajeros, quienes fueron asesinados brutal me nte por Luis Posada Carriles, el 6 de octubre de 1976. Cada uno de ellos dejaron a familiares detrás: madres, padres, esposas, esposos y niños. Sólo 9 de 73 cuerpos fueron recuperados en el mar. Las familias todavía no han superado su dolor. La Republica Bolivariana de Venezuela permanecerá comprometida a llevar a Luis Posada Carriles a la justicia en Caracas, por 73 casos de homicidio en primer grado. Nunca olvidaremos uno de los más terribles actos de terrorismo moderno co me tidos en este hemisferio.
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