by Genaro Pérez Reyes
Oct. 17, 2008
Reprinted from Radio Nuevitas

Ten years after being detained in Miami for watching over to terrorist groups that operate against Cuba, the Cubans Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, René González and Fernando González remain imprisoned in the United States.

The lawyers of the Cuban Five prepare their appeal to the Supreme Court of the United States after the precedent judgment that finished in the recent denial of the request of reconsideration of the guilt judgment emitted by the Court of Appeals of the Eleventh Circuit of Atlanta.

In Parallel, it is expected that the Court of Miami decides on the indication of re-sentence that it received by the referred Court of Atlanta in relation to the Cuban antiterrorists Ramón Labañino, Antonio Guerrero and Fernando González.

The Universal Declaration of the Human Rights would be honoured, which proclamation for the United Nations turns sixty years in next December, in the case of putting an end to the unjust incarceration of the Five Cubans. And nobody can attribute to the United Nations a passive attitude in this cause, because its Work Group on Arbitrary Detentions declared illegal the incarceration of the Five in May of 2005.

Who follow the history of this cause will find that in such a distant date, if we look at it with the optics of the meaning of the freedom for the human beings, like it can be September 12th, 1998, in which the Five Cubans were detained in their homes in Miami, received abuses and after this detention followed the confinement in the cells called "the hole for 17 months", while they were presented as vulgar criminals by the Miami press.

To go into great detail, you will know that after this, a cloudy process followed then, in which the government of the United States imputed the detainees the crimes of Conspiracy to Make Murder and Conspiracy to Make Espionage, respectively under the arguments that Gerardo Hernández had had from the United States a direct linking with the shooting down in Cuban territory in 1996 of two light aircrafts of the terrorist groups and that this accused and also Antonio Guerrero and Ramón Labañino appropriated for themselves of information that would risk the security of the imperial power.

In fact the study of this cause will take to the conclusion that the shooting down of the light aircrafts was a justified and sovereign decision after it was long enough warned that severe measures would be adopted if the flights that took a risk to hundred people continued like defiant jeer of the terrorist groups.

In connection with the espionage nothing is certain. The Five Cubans only appropriated and they took out comclusions of the meetings and encounters that the terrorist groups celebrated openly in Miami with all impunity.

Neither was it noticed the third crime classed as no notification Foreign Agent because to be notified was to surrender before the power that has demonstrated to protect the terrorists, like it has done it with the manipulations that keeps free to Luis Posada Carriles and to Orlando Bosch.

I invite to study this cause, to analyze the arguments of the defenders, of the groups of solidarity among those that are several Nobel Prizes and the allegations to the Five in the trial.

It is an opportunity to fight for the justice. Remember that a great thinker of Latin America that was named José Martí said that, to see a crime in calm is to do it.

por Genaro Pérez Reyes
10 de octubre de 2008
Reimprimado de Radio Nuevitas

Diez años después de ser detenidos en Miami por vigilar a grupos terroristas que operan contra Cuba, permanecen encarcelados en los Estados Unidos los cubanos Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, René González y Fernando González.

Los abogados de los Cinco cubanos preparan su apelación a la Corte Suprema de los Estados Unidos luego de los fallos precedentes que terminaron en la reciente denegación de la solicitud de reconsideración del fallo de culpabilidad emitido por la Corte de Apelaciones del Onceno Circuito de Atlanta.

Paralelamente se espera porque la Corte de Miami decida sobre la indicación de resentencia que recibió de la referida Corte de Atlanta con relación a los antiterroristas cubanos Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González.

Se honraría la Declaración Universal de los Derechos Humanos cuya proclamación por las Naciones Unidas cumple sesenta años en diciembre próximo si se pusiera fin a la injusta encarcelación de los Cinco cubanos. Y a las Naciones Unidas no se le puede atribuir pasividad en esta causa porque su Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias declaró ilegal la encarcelación de los Cinco en mayo de 2005.

Quienes sigan la historia de esta causa encontrarán que en una fecha tan lejana, si la miramos con la óptica del significado de la libertad para los seres humanos, como puede ser el doce de septiembre de 1998 los Cinco cubanos fueron detenidos en sus domicilios en Miami, recibieron maltratos y a esta detención siguió el encierro en la celdas llamadas “el hueco por 17 meses”, mientras se presentaban como vulgares delincuentes por la prensa de Miami.

Para más abundar encontrarán que siguió luego un turbio proceso en el que el gobierno de los Estados Unidos imputó a los detenidos los delitos de Conspiración para Cometer Asesinato y Conspiración para Cometer Espionaje, respectivamente bajo los argumentos de que Gerardo Hernández había tenido desde los Estados Unidos una vinculación directa con el derribo en territorio cubano en 1996 de dos avionetas de los grupos terroristas y de que este mismo acusado y además Antonio Guerrero y Ramón Labañino se apropiaban de información que arriesgaría la seguridad de potencia imperial.

En realidad el estudio de esta causa llevará a la conclusión de que el derribo de las avionetas fue una decisión justificada y soberana después que se advirtió sobradamente que se adoptarían severas medidas si los vuelos que arriesgaban a cientos de personas continuaban como burla desafiante de los grupos terroristas.

En relación con el espionaje nada hay de cierto. Los Cinco cubanos solo se apropiaron y sacaron conclusiones de las reuniones y encuentros que con toda impunidad celebraban públicamente los grupos terroristas en Miami.

Tampoco resultó atinado el tercer delito tipificado como Agente Extranjero sin Notificarse porque notificarse era entregarse ante la potencia que ha demostrado proteger a los terroristas, como lo ha hecho con las manipulaciones que mantiene libres a Luis Posada Carriles y a Orlando Bosch.

Invito a que se estudie esta causa, a que se analicen los argumentos de los defensores, de los grupos de solidaridad entre los que se encuentran varios Premios Nóbel y los alegatos de los Cinco en el juicio.

Es una oportunidad de luchar por la justicia. Recuérdese que un gran pensador de Latinoamérica que se llamó José Martí dijo que, ver un crimen en calma es cometerlo.